Hoy es el aniversario de la muerte del marido de Akane. Su marido falleció hace tres años debido a un accidente. Su hija y su yerno también regresaron. Su hija sigue siendo la misma, sigue despreocupada e ingenua y no comprende los sentimientos de los demás. Al contrario, su yerno siempre la cuida y la ayuda. Cuando su marido falleció, le compró un pájaro para hacerle compañía, ayudándola a sentirse menos sola. Desafortunadamente, cuando su hija intentó tocar al pájaro, lo dejó volar. Aunque estaba muy triste, aun así escondió a sus dos hijos. Poco a poco también se dio cuenta de que sentía algo especial por su yerno, quien despertó sus instintos femeninos. Debido a que su esposa se negó a tener relaciones sexuales, tuvo que ir a la sala para masturbarse. Akane lo vio e hizo explotar su deseo sexual de larga data. Ama a su yerno, quiere dedicarle todo su cuerpo y su corazón. Y para no decepcionarla, él tampoco. En su corazón sólo está ella, la suegra gentil y amable, que siempre se preocupa por los sentimientos de los demás, en completo contraste con su esposa. Cuando su hija y su yerno regresaron, su pájaro regresó. Al igual que dos personas, aunque estén muy separadas, ella siempre esperará el día en que él regrese a su lado.